Autor/es: Sandrine Baume
Editorial: Jusbaires
Edición: 2015
Encuadernación: rústica
Páginas: 128
Idioma: castellano
ISBN: 9789873690273

Frente a las críticas antiparlamentarias de entreguerras y el desencanto con respecto a las instituciones republicanas, Kelsen ofrece una definición de la democracia que enfrenta las oposiciones clásicas a esta forma de gobierno.
A las objeciones que deslegitiman el juego democrático, so pretexto de que es incapaz de producir una decisión "correcta", Kelsen opone su relativismo, que sitúa los conflictos y su resolución pacífica en el corazón de la vida de las instituciones.
Sus reflexiones sobre el fenómeno democrático hacen eco a su positivismo jurídico, y ambos diseñan una doctrina coherente, profundamente marcada por el rechazo a la trascendencia y la renuncia a la regla "justa".
Suscitada por las conmociones políticas que surgen después de 1918, la cuestión de la estabilidad de las instituciones democráticas no se impone solamente a Kelsen, sino igualmente a otros juristas, como Hermann Heller y Carl Schmitt. La diversidad de respuestas ofrecidas a esta cuestión, testimonio de orientaciones doctrinarias divergentes -la liberal, la socialdemócrta, la estatista e incluso la autoritaria-, subraya, paradójicamente, el abanico de cuestionamientos que todas ellas tienen en común, relativo a la perennidad del Estado y a los modos de integración de la pluralidad.
Frente a estos interrogantes candentes, la contribución científica de Kelsen reside en la teorización del compromiso como mecanismo de resolución de los conflictos, propio de la democracia parlamentaria.

Kelsen un alegato por la democracia - Sandrine Baume - Libro

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Autor/es: Sandrine Baume
Editorial: Jusbaires
Edición: 2015
Encuadernación: rústica
Páginas: 128
Idioma: castellano
ISBN: 9789873690273

Frente a las críticas antiparlamentarias de entreguerras y el desencanto con respecto a las instituciones republicanas, Kelsen ofrece una definición de la democracia que enfrenta las oposiciones clásicas a esta forma de gobierno.
A las objeciones que deslegitiman el juego democrático, so pretexto de que es incapaz de producir una decisión "correcta", Kelsen opone su relativismo, que sitúa los conflictos y su resolución pacífica en el corazón de la vida de las instituciones.
Sus reflexiones sobre el fenómeno democrático hacen eco a su positivismo jurídico, y ambos diseñan una doctrina coherente, profundamente marcada por el rechazo a la trascendencia y la renuncia a la regla "justa".
Suscitada por las conmociones políticas que surgen después de 1918, la cuestión de la estabilidad de las instituciones democráticas no se impone solamente a Kelsen, sino igualmente a otros juristas, como Hermann Heller y Carl Schmitt. La diversidad de respuestas ofrecidas a esta cuestión, testimonio de orientaciones doctrinarias divergentes -la liberal, la socialdemócrta, la estatista e incluso la autoritaria-, subraya, paradójicamente, el abanico de cuestionamientos que todas ellas tienen en común, relativo a la perennidad del Estado y a los modos de integración de la pluralidad.
Frente a estos interrogantes candentes, la contribución científica de Kelsen reside en la teorización del compromiso como mecanismo de resolución de los conflictos, propio de la democracia parlamentaria.