Autor/es: Javier Memba
Editorial: T&B
Edición: 1961
Encuadernación: rústica
Páginas: 178
Idioma: castellano
ISBN: 9788496576179

Las películas de serie B surgieron como respuesta de los estudios de Hollywood a la caída de público experimentada tras el crack de 1929. Para maximizar beneficios, las majors optaron por ofrecer dos largometrajes por el precio de uno. El plato fuerte sería una lujosa producción de clase A; el "relleno", un barato film de clase B. Nació así una tipología que sería adoptada por los propios estudios y generalizada a través del tiempo. Las películas de tipo B, usualmente de género (westerns, gangsters, terror o ciencia-ficción), se caracterizaban por su bajo presupuesto, contar con actores poco conocidos (o viejas glorias en las últimas) y rodarse en muy poco tiempo. Los grandes estudios tenían unidades especializadas en películas de serie B, pero también había pequeñas compañías ­como la Republic o la Monogram­ que se dedicaban a este tipo de cine. Tras la caída del sistema de estudios a finales de los años 50, pasó a llamarse serie B a toda película de bajo presupuesto, y más tarde se convirtió en sinónimo de cine de baja calidad. Pero, a pesar de sus connotaciones peyorativas, muchas de las cintas de serie B que aparecieron en aquella época (La mujer pantera, Yo anduve con un zombie, El demonio de las armas) se convirtieron en clásicos, lanzando a la fama a directores como Jules Dassin, Jacques Tourneur y Anthony Mann. Jornaleros de la gloria que, trabajando en la más absoluta precariedad, hicieron algunas de las mejores películas de su tiempo.

La Serie B - Javier Memba - Libro

$4.32 USD
Out of stock
La Serie B - Javier Memba - Libro $4.32 USD
Protected purchase
Your data taken care of throughout the purchase.
Returns and changes
If you don't like it, you can change it for another one or return it.

Autor/es: Javier Memba
Editorial: T&B
Edición: 1961
Encuadernación: rústica
Páginas: 178
Idioma: castellano
ISBN: 9788496576179

Las películas de serie B surgieron como respuesta de los estudios de Hollywood a la caída de público experimentada tras el crack de 1929. Para maximizar beneficios, las majors optaron por ofrecer dos largometrajes por el precio de uno. El plato fuerte sería una lujosa producción de clase A; el "relleno", un barato film de clase B. Nació así una tipología que sería adoptada por los propios estudios y generalizada a través del tiempo. Las películas de tipo B, usualmente de género (westerns, gangsters, terror o ciencia-ficción), se caracterizaban por su bajo presupuesto, contar con actores poco conocidos (o viejas glorias en las últimas) y rodarse en muy poco tiempo. Los grandes estudios tenían unidades especializadas en películas de serie B, pero también había pequeñas compañías ­como la Republic o la Monogram­ que se dedicaban a este tipo de cine. Tras la caída del sistema de estudios a finales de los años 50, pasó a llamarse serie B a toda película de bajo presupuesto, y más tarde se convirtió en sinónimo de cine de baja calidad. Pero, a pesar de sus connotaciones peyorativas, muchas de las cintas de serie B que aparecieron en aquella época (La mujer pantera, Yo anduve con un zombie, El demonio de las armas) se convirtieron en clásicos, lanzando a la fama a directores como Jules Dassin, Jacques Tourneur y Anthony Mann. Jornaleros de la gloria que, trabajando en la más absoluta precariedad, hicieron algunas de las mejores películas de su tiempo.